“Podemos es un mecanismo para el
protagonismo popular y ciudadano. Queremos que nuestro programa se conforme a
través de la participación ciudadana y de los Círculos Podemos. Nadie sabe
mejor lo que necesitamos que los ciudadanos que día a día sacan adelante el
país. Democracia”.
Esta frase,
repleta de subrayados, remarcados, negritas y colores copa la web de la
agrupación política Podemos, cuyo líder y secretario general es Pablo Iglesias
Turrión. Esta agrupación, como ellos mismos se definen, nació en enero del
presente año con el objetivo inicial de oponerse a los recortes sociales que
estaban siendo llevados a cabo por el Gobierno a consecuencia de la crisis
económica que atraviesa España. El movimiento se presentó de manera oficial el
17 de enero en el Teatro de Barrio del barrio de Lavapiés en Madrid con una
rueda de prensa en la que intervinieron los líderes del partido político.
La evolución
del proyecto creció como la espuma. Podemos, al poco tiempo de su creación,
decidió presentarse a las elecciones europeas de mayo con tres condiciones que
se cumplieron con creces. El grupo no se presentaría a dichas elecciones de no
ser que un número concreto y elevado de ciudadanos apoyaran a la formación en
su web oficial (podemos.info) y siempre y cuando se buscase la unidad con partidos
de izquierda. El movimiento ciudadano pues, presentaba sus primeras
vestimentas ideológicas oficiales.
No todo
estaba claro respecto a Podemos. ¿Eran comunistas? ¿Pablo Iglesias fue de
verdad un hombre muy cercado al ya fallecido Hugo Chávez? ¿Cuál era su
intención? Pese a todas estas incógnitas, Podemos presentó una candidatura a
las elecciones al Parlamento Europeo elaborada a través de elecciones primarias
abiertas y fue la cuarta más votada consiguiendo cinco escaños.
El partido
entró a partir de este momento en un auge de popularidad radical impulsado, en
su mayoría, por las redes sociales. Desde
antes de las elecciones, ya era la primera fuerza política en las redes
sociales, pero en la red social más utilizada del mundo, Facebook, pasó de 100
000 a 600 000 apoyos tras su éxito en las europeas. Pese a su creciente
popularidad y hechos, el partido rechaza cualquier tipo de
ideología política que se le adscriba como posible forma de estrategia
política.
Para
entender qué es Podemos, parece imprescindible abordar la personalidad y pasado
de sus miembros más destacados:
- Pablo Iglesias: (17 octubre, 1978) Secretario general del partido. Hijo Luisa Turrión, abodada del sindicato CCOO y de Javier Iglesias, antiguo miembro del FRAP. Miembro de Juventudes comunistas hasta los 21 años y profesor titular interino en la UCM, además de colaborador de tertulias políticas. Ha sido acusado de estar relacionado con el chavismo, el castrismo, apoyar a ETA y recibir financiación ilegal de Venezuela.
- Juan Carlos Monedero: (12 enero, 1963) Secretario de proceso constituyente y programa de Podemos. Politólogo y escritor español, profesor de Ciencia Política en la Universidad Complutense de Madrid. Ha sido asesor del político comunista español Gaspar Llamazares y también de Hugo Chávez entre 2005 y 2010.
- Teresa Rodríguez: (18 septiembre, 1981) Diputada de Podemos en el Parlamento Europeo. Activista de Marea Verde y militante de Izquierda Anticapitalista. Fue militante del partido comunista español Izquierda Unida.
- Íñigo Errejón: (Madrid, 1983) Secretario de política de Podemos. Hijo de José Antonio Errejón Villacieros, militante de Izquierda Anticapitalista y miembro durante la Transición del Partido del Trabajo.
- Pablo Echenique: (28 agosto, 1978) Diputado de Podemos en el Parlamento Europeo. Científico y político español, de origen argentino. Sufre atrofia muscular espinal, una enfermedad degenerativa desde que era un bebé y lleva escribiendo sobre ella varios años en eldiario.es, medio de izquierdas y fundado por Ignacio Escolar.
- Carlos Jiménez Villarejo (3 junio, 1935) Exdiputado de Podemos en el Parlamento Europeo y miembro del círculo ciudadano. Antiguo opositor antifranquista, militante del PSUC y partidario del Ezker Batua-Berdeak, símil de Izquierda Unida en el País Vasco. Fue fiscal anticorrupción de España.
- Carolina Bescansa: (Santiago de Compostela, 1971) Secretaria de Análisis Político y Social de Podemos y cofundadora. La más ‘moderada’ de Podemos.
- Jesús Montero: secretario general de la Unión de Juventudes Comunistas de España desde 1984 a 1989. Montero también participó en la creación de Izquierda Unida en 1986.
- Miguel Urbán: activista social y militante de Izquierda Anticapitalista en Madrid en las elecciones generales de 2011.
También hay varios exmiembros de IU como Javier Sánchez de la Serna o Luis Ángel
Aguilar, que han dejado el partido de Cayo Lara para unirse al de
Pablo Iglesias.
Pese a ser
las cabezas visibles del proyecto, Podemos se aúna tal y como dice en la
ciudadanía y en los Círculos Podemos que forman los ciudadanos de España, sin
importar su edad o su ideología.
Pese al pasado político de los miembros del
partido, Podemos rechaza cualquier tipo de ideología. El programa político de
Podemos pese a todo, puede consultarse punto por punto en su web oficial (http://podemos.info/wordpress/wp-content/uploads/2014/05/Programa-Podemos.pdf).
El programa
electoral de Podemos se divide en seis puntos, que a su vez tienen diferentes
ramificaciones todas ellas bajo el eslogan: ‘construir la democracia’.
A saber
las más importantes:
- Recuperar la economía, construir la democracia.
1.1 Plan de rescate ciudadano centrado en la creación de empleo decente en
los países del sur de Europa
1.3 Conversión del BCE en una institución democrática para el desarrollo
económico de los países
1.5 Reorientación del sistema financiero para consolidar una banca al
servicio del ciudadano
1.6 Recuperación del control público en los sectores estratégicos de la
economía
1.9 Persecución y endurecimiento de las sanciones del delito fiscal
1.10 Política tributaria justa orientada a la distribución de la riqueza y
al servicio de un nuevo modelo de desarrollo
1.12 Derecho a una renta básica para todos por el mero hecho de ser
ciudadano.
- Conquistar la libertad, construir la democracia.
2.3 Democratización de la gestión, ejecución y evaluación de la inversión
pública a través de presupuestos participativos
2.4 Control y limitación de las actividades llevadas a cabo por los
lobbies. Difusión pública de su actividad y sus carteras de clientes
- Conquistar la igualdad, construir la democracia.
3.4 Garantía del derecho a la salud y de un modelo de asistencia sanitaria
público, de cobertura universal, equitativa y gratuita
3.5 Garantía del derecho al conocimiento, la formación académica y una
educación pública, gratuita, laica y universal
3.8 Garantía de los derechos sexuales y reproductivos y del derecho a
decidir sobre el propio cuerpo para todas las personas
- Recuperar la fraternidad, construir la democracia.
4.3 Derecho a tener derechos. Reconocimiento del derecho de los y las
emigrantes (eliminación de las vallas de Melilla).
- Conquistar la soberanía, construir la democracia.
5.1 Derogación del tratado de Lisboa
5.2 Modificación de los Tratados de libre comercio (revisar Tratados con
América Latina).
- Recuperar la tierra, construir la democracia.
6.2 Acceso al agua, derecho humano básico
6.4 La energía al servicio de las personas: parar el cambio climático, mejorar
la calidad del aire
6.7 Protección animal, nueva exigencia social
Asamblea de Podemos. Mayo, 2014.
¿QUÉ ES PODEMOS? ¿PUEDEN?
- Jordi Évole: “Parece que quieres integrar
a toda la gente posible en la ola de Podemos… Militares, religiosos… Todos
ellos que en principio no se acercarían a Podemos”
- Pablo Iglesias: “Es que eso es
imprescindible para ganar (…)”
Salvados (LaSexta) 24-10-2014
Podemos
quiere cambiar el país, quiere, como se ha demostrado líneas atrás, construir
la democracia. Una democracia que según sus propios líderes no es tal en
España, una España corrupta y demacrada por una casta política que lejos de
querer el bien político y de los ciudadanos, aboga por los derechos de unos
pocos con los que se identifican.
Pero, ¿qué
es en realidad Podemos? Como se ha suscrito anteriormente, el partido político
rechaza cualquier tipo de ideología política. Sin embargo, todas las ‘cabezas
de turco’ de la formación, brazo político del movimiento 15-M, han tenido o
tienen una relación más cercana o más lejana con el socialismo político, la
izquierda o el comunismo. Para los ciudadanos españoles según el CIS además,
Podemos se sitúa en la izquierda política.
Pablo
Iglesias, líder y Secretario General del partido defendía en el programa de
LaSexta, Salvados (Pablo Iglesias en
Ecuador), que para el partido era “molesto” la continua comparación con
Venezuela. “Es escandaloso que desde
España se tache al Gobierno de Venezuela como una dictadura. Es obvio que nos
iban a dar de ‘hostias’ si hubiéramos visitado Venezuela”. Además en este
mismo programa, hablaba de todas sus medidas, de todo el cambio estructural que
quieren hacer en el país, del salario máximo, del salario básico, de la rebaja
de la edad de jubilación… Pero con un ‘pero’ que el propio presentador del
programa televisivo Jordi Évole denotó:
-
Pablo
Iglesias: “En política nunca hay que comprometerse a algo que no se pueda
cumplir inmediatamente. (…) Espero que medidas como retrasar la edad de
jubilación se puedan llevar a cabo en cuatro años”.
-
Jordi Évole:
“Te escucho y veo falta de rotundidad: ojalá, espero, puede…”.
-
PI:
“Claro, hay que ser prudentes”.
-
JE: “Pero
un programa electoral no debe ser prudente, o se hace, o no se hace…”.
Parece
indiscutible que el país necesita un cambio. Millones de personas en paro,
desigualdades sociales, reducción de los derechos y libertad de la ciudadanía,
pocas oportunidades, casos graves y abundantes de corrupción… “Nosotros nos llamamos Podemos porque todo el
mundo decía que no se puede”.
Esta frase del Secretario General del partido
es una común en la sociedad española, en unos ciudadanos que ven inalcanzables
cosas tan sencillas como encontrar un empleo bien remunerado o tener las mismas
oportunidades de encontrar trabajo que el hijo del empresario de turno. Podemos
se presenta, como bien dice se deduce de esa frase, como la voz del ciudadano
impotente, de la mayoría del pueblo. ¿Pero persigue de verdad el fin de ayudar
a la ciudadanía o buscan lucrarse, como ya viene ocurriendo, de encontrarse en
situaciones de poder? ¿Son tan honestos como quieren aparentar? ¿Conocen la
palabra hipocresía?
Ya se ha
demostrado que Íñigo Errejón, hombre fuerte de Podemos por antonomasia, cobraba
un salario en la Universidad de Málaga por un trabajo que en realidad no
realizaba gracias a la complacencia de su colega de Podemos, Alberto Montero. Este tenía que supervisar el trabajo de
investigación de Errejón y pese a que este no se presentaba a las horas
laborales previstas en un inicio, no se notificó de ello. La UMA, en
consecuencia, ha suspendido de empleo y sueldo al político español, en
concreto, señala que Errejón no "desarrolló
su trabajo conforme a los términos y cláusulas establecidos en el contrato
suscrito con la Universidad", así como "no haber solicitado la compatibilidad para el ejercicio de actividades
privadas desarrolladas durante la vigencia del contrato".
Otro de los
casos que viene salpicando a Podemos es el de los pagos en ‘B’ o ‘en negro’ que
Pablo Iglesias recibía por la realización de su programa ‘La Tuerka’.
Supuestamente y según informa ElEconomista, su jefa de producción y actual dirigente de Podemos, Sarah
Bienzobas, era la encargada de gestionar la forma y el momento de los pagos en
negro que Enrique Riobóo, dueño del Canal 33, hacía a su asociación sin ánimo
de lucro.
El pago -de 1.500 euros al mes en B y otros 500 euros con factura- se
justificaba por la realización del programa La Tuerka, aunque en realidad
respondía al abono de una comisión por la intermediación del líder
de Podemos con Irán para que emitiera en el Canal 33. Algunos
aseguran que el dinero procedía ilegalmente desde Venezuela.
El
propio Pablo Iglesias defiende que son ciudadanos de la calle, que son
auténticos y en eso precisamente se diferencian de la ‘casta’, de Pedro Sánchez
o Mariano Rajoy o de los partidos políticos del país. Mientras ‘la casta’
intentan parecer normales, ellos, Podemos, lo son. Sin embargo, no ha dudado en
afirmar en multitud de ocasiones que está asesorado y que, siguiendo la pauta
de asesores en imagen, ha tenido que deshacerse de un piercing que llevaba en
la ceja, que ha tenido que arreglar su pelo e incluso, la vestimenta que lleva
o el color de la coleta es una cuestión plástica.
También en esta entrevista se jacta de dirigir
programas de televisión e incluso ha llegado a asegurar que de llegar a ser
presidente del Gobierno, podría valorar presentar un programa de televisión o
acudir semanal o mensualmente a los medios de comunicación. Risto Mejide, en un
claro tono irónico, le dijo a Pablo Iglesias que “con lo que te gusta hablar de
tu programa, con todas las veces que has salido en tertulias, entre tanta
televisión, quizá se te olvide que también eres dirigente de un partido
político”, algo que el propio dirigente político no negó. (Viajando con Chester, CUATRO, 28 de septiembre).
¿Cumplirá
Pablo Iglesias el programa que Podemos presentó a las europeas? ¿Hará lo que
prometen, y no lo que critican de partidos como el Partido Popular, que durante
su legislatura no ha cumplido lo propuesto? El propio secretario general
responde la pregunta en Salvados: “¿Nos pasamos de frenada a la hora de
hacer el programa electoral de las europeas? Puede ser. El programa que hicimos
para las Europeas no puede ser el que hagamos para las generales, lo hicimos
muy rápidos empujados por una ola de ilusión”.
¿Es Podemos una agrupación comunista? El propio partido
político rechaza cualquier tipo de ideología que se le otorgue, centrándose
solo en la ciudadanía y en las ideas que estos proponen. El comunismo se trata
con una cierta dosis, merecida o no, de hipérbole, de exageración y de
difamación. Hablar de comunismo es hablar de genocidios, terrorismo y pobreza.
El comunismo, como lo narraron Marx y Engels, defienden la soberanía del pueblo
sobre la burguesía. El burgués es el enemigo, hay que acabar con él para
establecer un régimen social incluso, de ser necesario, con la violencia.
Pablo Iglesias, en el ya citado programa de Salvados,
pronunció una serie de frases bastante reveladoras. “De Correa, (presidente de Ecuador) me encantó la medida que impulsó a
los bancos. Prohibió la comisión en los cajeros automáticos. Me gustó porque es
una medida de confrontación con los ricos”. La violencia no es condenada en
el manifiesto comunista, de hecho, se defiende la caída de los ricos mediante
el uso de la violencia. Él hablaba en Salvados de ‘ajustar cuentas con los
ricos’: “¿Hemos venido para ajustar cuentas? Puede que haya una parte
de verdad en eso.
(…) Si dijéramos que el capitalismo es un
sistema corrupto, asesino, que nos lleva a la destrucción totalitaria del mundo
tendríamos razón”. “Vamos a aumentar
la presión fiscal sobre las grandes fortunas. Solo sobre los ricos”.
¿Quiere
acabar Podemos con el capitalismo, objetivo fundamental del comunismo? El
partido niega cualquier tipo de ideología. ¿Quiere acabar su líder, con el
comunismo? Iglesias responde: “Hasta que
podamos dar esa enmienda a la totalidad tendríamos que utilizar las leyes del
capitalismo, qué remedio, ya me gustaría a mí acabar con las políticas de
mercado”. Una práctica bastante común de países de régimen comunista como
Venezuela o Bolivia es nacionalizar empresas. Luz, gas, telefonía,
hidrocarburos, nada escapa de la nacionalización. En el programa de Podemos no
aparece reflejado como tal, pero una de las medidas a tomar hacia las empresas,
para Pablo Iglesias, podría llegar a esar esta misma nacionalización: “Nacionalizar empresas como Telefónica es una
posibilidad. La PP debe estar subordinada a la sociedad. Si la empresa no
accede a mis condiciones y a los precios que yo le imponga, le nacionalizaré la
empresa”.
¿QUÉ DICEN DE PODEMOS?
“Me sorprende que tanto expolíticos como
dirigentes de los partidos más poderosos echen pestes de Podemos. Porque, para
mí, el problema no reside en Podemos, sino en qué queremos. Igual no es la
solución, pero es evidente que el problema que nos ha caído con la crisis y su
gestión no lo ha generado Podemos”
Jordi Évole (ElPeriódico, 02/06/2014)
Algunos
periodistas o comunicadores como Carlos Herrera han descalificado Podemos y su
programa económico y electoral, otros, no tanto. Muchos critican, otros
aplauden. Algunos acusan, otros desmienten.
¿A quién creemos? Carlos Herrera se
mostraba contundente en su editorial en Ondacero el pasado 2 de diciembre de
2014: “el programa político de Podemos,
los de Podemos, que ‘se están llevando el salchichón’ dejan de ser populistas.
Pasan a ser lo que son, de extrema izquierda. El programa político que ha
confeccionado algún economista como es Vicenç Navarro, que por favor, no nos
lleven los ahorros a los demás, es una carta a los Reyes Magos. Podemos ha
descubierto la solución feliz que es ‘no voy a pagar las deudas y le voy a pedir
más dinero a Europa porque voy a derrochar’. Renunciar a pagar la deuda es
decir que no puedes hacerlo, que no es asumible por ti mismo y simplemente ese
anuncio te lleva a un colapso financiero. Eso es lo que pronuncian estos
lumbreras. No es un programa coherente. Aumentan el despilfarro y además quieren
que lo pague Europa. Aumentar las cotizaciones sociales significa que el
empresario las debe pagar pero que el ciudadano las sufrirá. Bajará el salario,
trabajarán menos horas, el empresario pagará más y ya me dirán ustedes de donde
se va a sacar el dinero”.
La clase
política no ha dudado en criticar a Pablo Iglesias y Podemos. Desde el propio
órgano de Gobierno las descalificaciones a Podemos, sus miembros, su lenguaje y
hasta su forma de vestir han levantado muchas polémicas. El periodista Eduardo
Inda se encuentra demandado por asegurar que recibe pagos ilegales de Venzuela.
Alfonso Rojo está denunciado por llamar “mangante”
y “chorizo” al propio dirigente de la
agrupación y algunos políticos como Esperanza Aguirre también se encuentra demandada
por asegurar que Pablo Iglesias “está del
lado de ETA”.
Otros políticos como Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ex
presidente de la junta de Extremadura, en una columna para el diario El País, se
ha referido a Podemos como algo innovador del que, por qué no, habría que
esperar ver qué resultados da: “me inclino más que por el Podemos por el
Probemos. No pienso en términos de buenos y malos, de casta y de estafados. Si
desde la política clásica no se hacen las cosas de forma diferente a como se
han hecho hasta aquí, no es porque se sea o no de la casta, no es porque se sea
mejor o peor político, es porque no se sabe hacer de otra manera lo que se
hace. (…) Ante ese panorama se tienen dos caminos: o se sigue tocando igual que
se tocaba siempre o se trata de comprender y aprender de las nuevas
experiencias, de los nuevos caminos, de quienes tratan de hacer cosas
diferentes en tiempos distintos. Quienes
no estamos seguros de nada, pensamos que vienen para probar. (…) Si en los
laboratorios solo se apoyaran los experimentos que prometan un 100% de éxito,
la ciencia hace tiempo que hubiera quedado estancada y la sociedad no se habría
beneficiado de los que triunfaron después de múltiples fracasos. También en
política, es posible que el 90% de los intentos novedosos acaben en fracaso,
pero el 10% del éxito conseguido será el nuevo conocimiento que nos permita
seguir avanzando para conquistar el futuro. Desde esa forma de ver los
acontecimientos, no me parece bien ni mal lo que hacen aquellos que han
decidido adentrase en caminos no trillados por la política. Me interesa saber
qué resultado tienen las pruebas que están haciendo y qué pueden hacer en el
futuro”.
El propio Pablo Iglesias aseguraba que ningún dirigente del PP o del PSOE se había molestado en hablar con él y asegura que, cuanto más les insultan y más les critican, más a su vez les apoya la ciudadanía. Otro de los periodistas que defendió a Podemos fue Jordi Évole en su columna de opinión de ElPeriódico (02/6/2014) “Me sorprende que tanto expolíticos como dirigentes de los partidos más poderosos echen pestes de Podemos. Porque, para mí, el problema no reside en Podemos, sino en qué queremos. Igual no es la solución, pero es evidente que el problema que nos ha caído con la crisis y su gestión no lo ha generado Podemos. En cambio, sí tienen mucho que ver los partidos que siguen cortando el bacalao. Mientras unos no supieron ver que venía y nos golpearon con los primeros recortes, los otros, que prometieron tener la solución al problema, nos han rematado con más recortes pero, eso sí, han sabido ver que la crisis ya ha acabado, una visión aún invisible para los ciudadanos. ¿O es que Podemos tiene algo que ver con que uno de cada cinco españoles (el 20,4%) viva por debajo del umbral de pobreza? (…) Y si eluden el pago de impuestos, ¿es culpa del poder político o de Podemos? De Podemos, lo dudo; acaba de llegar y no está en el poder. Insisto: el problema, por mucho que algunos lo prediquen, no reside en Podemos, sino en qué queremos. En qué queremos hacer, y hacerlo”.
NO ES ORO
TODO LO QUE RELUCE
"Se puede engañar a parte del pueblo
parte del tiempo, pero no se puede engañar a todo el pueblo todo el
tiempo".
Abraham Lincoln
En un país con tantas desigualdades
sociales, tantos casos de pobreza, tanta rabia, ira y tanto desorden emocional
en la población, estar en la oposición, y más en España, donde el nivel de sus
dirigentes es bastante limitado, es muy sencillo. Solo que para hacerlo bien se
necesita, como mínimo, dedo y medio de frente y los que han llegado ahora
tienen un buen par de ellos.
El Partido Popular de Mariano Rajoy comenzó
a gobernar porque el PSOE de Zapatero lo hizo mal y el PSOE de Zapatero comenzó
a gobernar porque el PP Aznar lo hizo mal. Ahora que lo han hecho mal los dos,
era de esperar que surgiera una nueva fuerza política. Surgieron varias, como
UPyD, pero ninguna con los dedos de frente suficientes para saber aprovechar el
descontento social y el panorama nacional en el que vivía España. Hacer eso
sería rebajarse al nivel de la ciudadanía y eso la clase política, nunca, nunca
debe hacerlo. Los políticos tienen que escuchar los problemas de los pobres
ciudadanos en un bar mientras toman una copa –como diría Toni Cantó- y gobernar
sobre esa gente. Los políticos se juntan con los políticos y los ciudadanos con
quienes pueden. Para aprovechar el descontento social que vive España hay que
ser ciudadano y nuestros políticos, por desgracia, hace tiempo que dejaron de
serlo.
Podemos es un partido de ideología
populista, dirigido por comunistas, que han visto en la sociedad un buen
trampolín para que, de una vez por todas, el socialismo tenga en España la
representación que Izquierda Unida nunca ha logrado conseguir. Podemos además,
es un partido hipócrita. No quieren el capitalismo pero quieren salir de la
crisis con las reglas del capitalismo. Dicen mostrarse tal y como son pero usan
asesores de imagen que les dicen qué está bien llevar puesto y qué no es
correcto. Podemos es, al igual que el comunismo, una utopía.
Sin embargo Podemos es algo
necesario. Quizá ahora con el miedo que genera que un partido se haga con el
poder de España, cuyas únicas bases se sustentan en el odio de la ciudadanía,
haga cambiar a los políticos del país. Quizá ahora se están dando cuenta de
que, de una forma u otra, a ese perro que ladraba en la calle el 15 de mayo de
2011 se le han caído ya los dientes de leche y puede morder.
Quizá ahora se den
cuenta de que el lenguaje político, el saber estar erguido frente a las
cámaras, el saludar mirando a los ojos a la gente en un mitin político con una
bonita sonrisa y que el traje te quede a las mil maravillas puesto sobre el
cuerpo no es suficiente para gobernar un país con tantas carencias como es
España. Quizá ahora, porque si Podemos se hace con el poder y llevan a cabo sus temerarias medidas económicas, tal y como diría
Carlos Herrera, “que a mí no me lleven
los ahorros”.